La uva cariñena, mazuelo en Rioja, carignan en el Languedoc-Roussillon, carinyena o samsó en Cataluña, es una de las grandes variedades del noreste español. Cada vez vemos mejores vinos de esta variedad en lugares tan emblemáticos como el Priorat, donde mejor expresión cualitativa ha tenido hasta la fecha. Se trata de una uva rústica, con estructura, con color y acidez, excelentes argumentos que en buenas manos se convierten en potencialidades. La capacidad evolutiva de los vinos de cariñena es también digna de mención. La uva cariñena necesita tiempo para expresarse y domar su rusticidad tánica, lo que nos lleva a incidir en la necesidad de darle a cada variedad y vino el tiempo necesario para que se encuentre en su mejor momento de consumo. Jorge Navascués nos muestra un 2019 completamente vivo, con un largo recorrido por delante. A destacar el carácter varietal tan vivo en él, con notas silvestres, la presencia de hierbas de monte, su carácter balsámico y su excelente acidez. Un vino perfectamente equilibrado que pone la pica en lo mejor de lo mejor en la DO Cariñena. Ya era hora de que esto llegara. Esperamos que sean muchos más productores los que se sumen a la elaboración de este tipo de vinos, aunque no sea fácil conseguirlos.